Cataluña en la encrucijada europea
La Unión Europea no va a permitir, ni puede, que un Estado miembro se desgaje porque el efecto sería devastador para el conjunto de la primera transnacional política del mundo
Una de los aspectos más llamativos de la “sostenella y no enmendalla” de Mas&Company es su afirmación gratuita de que Europa no puede dejar tirados a siete millones de catalanes en el supuesto de que este territorio decida independizarse de España que es el Estado miembro que tiene la patente y la titularidad de esa pertenencia a la UE.
Es una de las más graves equivocaciones que está cometiendo, amén de soliviantar a diario los sentimientos del resto de los españoles.
La Unión Europea no va a permitir, ni puede, que un Estado miembro se desgaje porque el efecto sería devastador para el conjunto de la primera transnacional política del mundo. Es algo obvio. Si ya con 28 Estados es prácticamente ingobernable, ¿acaso es posible que perviva con otros 20 o 30 territorios que dentro de Europa aspiran a disponer de Estado propio?
¡Una auténtica locura!
Mas, el tramposo
La Junta Electoral de Barcelona ha decretado que el president de la Generalitat Artur Mas violó la necesaria equidistancia como mandatario institucional y al mismo tiempo como candidato utilizando su puesto para hacer campaña en demérito del resto de las fuerzas que concurren. No es algo nuevo. Mas, básicamente es un tipo tramposo que si se dejase se engañaría así mismo.
Luego vino lo del veto en TV3 a Josep Borrell simplemente porque ha escrito un libro que pone de manifiesto las mentiras del nacionalismo secesionista e irredento.
Del trinke a la CUP
En las últimas horas un dirigente de las CUP ha dicho que tras el 27-S mandarán a paseo al señor Mas por corrupto y derechista. ¡Pues ya me dirán! El carajal que las encuestas vaticinan como ganador de las elecciones del próximo domingo puede ser de aurora boreal. Mientras bancos, instituciones económicas y grandes empresas vaticinan una debacle total si la independencia siquiera asoma el bigotito, los secesionistas no se ponen de acuerdo en qué pasará después, ni siquiera que liderará un proceso condenado a meter a los más pobres de Cataluña en una mayor depauperación y tristeza social.
En las últimas horas un dirigente de las CUP ha dicho que tras el 27-S mandarán a paseo al señor Mas por corrupto y derechista. ¡Pues ya me dirán! El carajal que las encuestas vaticinan como ganador de las elecciones del próximo domingo puede ser de aurora boreal. Mientras bancos, instituciones económicas y grandes empresas vaticinan una debacle total si la independencia siquiera asoma el bigotito, los secesionistas no se ponen de acuerdo en qué pasará después, ni siquiera que liderará un proceso condenado a meter a los más pobres de Cataluña en una mayor depauperación y tristeza social.
¡Cuantas explicaciones tiene que dar el cabeza de lista de Junts monsieur Romeva! Que dijo ser alguna vez y considerarse comunista.
Graciano Palomo es periodista y escritor, director de FUNDALIA y editor de IBERCAMPUS
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