miércoles, 26 de febrero de 2014

El PPais, el Efectista imbécil, Pepa Bueno, e Ignacio Escolar (o las hostias que se llevo Rajoy)

El PPais del gruPPo PPrisa ya lame el culo de Rajoy
Antes de dejaros este magnifico escrito de Rosa Paz, quiero comentaros la forma tan "sublime" de hacer el ridículo de un personaje que llamaré el EFECTISTA, un imbécil de la piara mediática, que se alimenta de la cloaca de Genova trece y que al parecer es una imposición de Cebrian a Pepa Bueno en el programa de Hoy por Hoy de esta mañana.
Con ambos estaba Ignacio Escolar, una persona, escritor y periodista de la izquierda que en la mayoría de ocasiones en las que escribe denota una equidad en su razonamiento que atrae y que respeto aunque no siempre comparta.

He empezado esta mañana en facebook con este comentario:"Lo poco que he leído de la prensa y lo oído esta mañana con Pepa Bueno en la SER del GruPPo PPrisa ha sido suficiente para darme cuenta que ayer no oí lo que oí ni dijeron lo que dijeron.

Ha sido como si las 24 horas pasadas del debate del Estado de la Nazi-on, hubiese si el Estado de la Nazi-off.

Después del café me seguiré explicando, pero solo un adelanto, un gilipollas de los que Cebrian debe imponer a Pepa Bueno para que largue lo que nadie en su sano juicio se atrevería a decir ha dicho textualmente "lo de Rubalcaba ha sido solo efectista", para dejar caer después que "todos son iguales". pero con otras palabras para disimular

Ignacio Escolar al lado sin abrir la boca tan ocupado como esta con tanto mesías que le revuelve el gallinero. El hombre ya no sabe donde acudir con los Podemos, los Izquierda Plural, los Izquierda Unida, los verdadera izquierda, los Partido X, los Equo, los "a ver si hay suerte y pillo cacho", "el anciano y la monja", vamos que izquierda somos todos y a ti te encontré en la calle.

Hasta luego."

Y aqui estoy; porque entiendo que las ratas genovesas, las que comen del pesebre y las que directamente lamen el suelo de la cloaca, se hayan puesto nerviosas al oír a Rubalcaba decirle en que país vivimos los españoles. Y ese país no es el que Rajoy y su banda nos cuentan, un país de maravillas que los agoreros no quieren ver, es un país lleno de mierda hasta el límite que permiten y no permiten las leyes, y toda esa mierda sale del PP de la mano de Rajoy.

Calificar como ha hecho el imbécil, de efectista el discurso de Rubalcaba dando la replica y al mismo tiempo en todos los morros, o mejor en el hocico, a Rajoy durante todo el tiempo de su exposición no es efectista ES LA PURA Y DURA REALIDAD, imbécil lameculos del PP.

No es efectista sino la realidad que nos envuelve el que en España sigue habiendo seis millones de parados, dos millones de hogares con todos sus miembros en paro, que la sanidad esta hecha una mierda desde que usted llego al igual que la educación, que los jóvenes se están yendo de España porque ustedes solo tienen manos para el dinero que nos roban cada mes en sobres con dinero negro, y se lo llevan a Suiza. Es eso que alguien ha dicho, españoles con el corazón aquí y el dinero en Suiza, eso es el PP. Que desde que salgo de casa solo veo mendigos en las esquinas, personas revolviendo en los contenedores de basura, negros y blancos con carritos de supermercado intentando llenarlos de papeles, cartones, metales, o cualquier cosa que les sirva para poder comer otro día más. 

Decir eso en el Parlamento no es efectista, miserable imbécil lameculos del PP, eso es decir la verdad, la realidad y desenmascarar al mayor cobarde que España ha tenido de presidente del gobierno y eso que antes ha tenido a otro de su misma banda y al fundador de la derecha esa vez envestido de golpista dictador y asesino.

También es un síntoma del nerviosismo de toda la cloaca genovesa el querer por activa y pasiva meter en la cuña el "todos son iguales", el "no ha ganado ninguno", "el todos hemos perdido", y sobre todo la última gran idea de esa mugre inmensa de mierda pensante de Genova trece con sus voceros pidiendo a estas alturas, asómbrense, LA GRAN COALICIÓN de ambos partidos. Algo insólito hace apenas un par de años, al inicio del gran fracaso económico del partido de los milagros.

Os dejo el enlac
e al escrito de Iñigo Saez de Ugarte sobre la derechizacion de El PPaís. Para que si teneis tiempo sepais de que va a ir la cosa a partir de ahora.


Pero ya os dejo con Rosa Paz, escribe muchísimo mejor que yo y además no suelta tacos.


Rubalcaba pierde los complejos

El que reapareció en la tribuna del Congreso de los Diputados fue el Rubalcaba que tanto han añorado los socialistas en los dos últimos años

No se sabe si este debate del estado de la nación será el último en el que participe Alfredo Pérez Rubalcaba. Depende de si decide presentarse a las primarias de noviembre en las que los militantes y los simpatizantes del PSOE elegirán a su candidato a la presidencia del Gobierno y, evidentemente, de que las gane. Sobre estas posibilidades hay, dentro de su partido y entre los analistas políticos, opiniones para todos los gustos. Desde los que dan por supuesto que peleará por la candidatura, hasta los que sostienen que hace tiempo que descartó la idea.
Pero tanto si el líder de los socialistas buscaba poner un broche de oro a su despedida y cierre al frente del partido, como si lo que pretendía era utilizar el cuerpo a cuerpo con Mariano Rajoy como plataforma de relanzamiento personal, el que reapareció en la tribuna del Congreso de los Diputados fue el Rubalcaba que tanto han añorado los socialistas en los dos últimos años. Ese parlamentario brillante, contundente, implacable. Aquel que parecía imbatible cuando en las épocas doradas de los gobiernos socialistas se batía el cobre frente a quienes ahora, desde el Gobierno, le reprochan que acabaran adoptando las medidas económicas y sociales que el PP le pedía –aunque luego no las votaba– y que le llevaron al PSOE a perder más de cuatro millones de votos en 2011.
Con un discurso rápido como una metralleta y eficaz como un martillo pilón, Rubalcaba fue desmontando el triunfalismo del ‘España empieza a ir bien’ de Rajoy, con una enumeración descriptiva de la realidad que viven millones de ciudadanos como consecuencia de los recortes laborales, sociales y civiles aprobados por el PP y que han dejado más desprotegidos y con menos derechos a parados, pensionistas, trabajadores, estudiantes, jóvenes... y pretende dejar con menos libertades a los ciudadanos, en general, con la reforma de la ley de Seguridad Ciudadana, y a las mujeres, en particular, con la reforma del aborto. Es lo que el secretario general del PSOE denominó "la apoteosis de la desigualdad" y la "involución autoritaria" del PP.
Sin más papeles que tres folios de notas, mirando fijamente a Rajoy, reapareció el Rubalcaba de los buenos tiempos, relajado, seguro, sólido y atizándole al presidente del Gobierno en todos los flancos débiles. Eficaz en sus críticas y en su manera de poner a Rajoy y a su Gobierno frente al espejo de las situaciones concretas. A Rajoy y a sus ministros. Porque no escatimó críticas directas a Cristóbal Montoro, Fátima Báñez, José Ignacio Wert o Jorge Fernández, a quienes fue citando por sus nombres y por sus reformas.
Las habilidades políticas y parlamentarias de Rubalcaba son de sobra conocidas, aunque en los últimos tiempos parecía que se habían esfumado. Ahora que Rubalcaba ha vuelto –ya saben, “el PSOE ha vuelto” dijo él en la clausura de la conferencia política del pasado noviembre– la cuestión es saber si su renovada energía y su recuperada soltura parlamentaria servirán para que el PSOE vaya recuperando la credibilidad perdida en los últimos años. No parece que les vaya a resultar fácil la reconciliación con los electores. Los comicios europeos de mayo, en los que el PSOE ha echado el resto, serán la primera prueba. Las primarias de noviembre, la siguiente. Entonces se sabrá si Rubalcaba vuelve para pelear por el liderazgo o si es la perspectiva de un próximo adiós la que le ha devuelto los poderes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario