Siguen estando ahí, no se fueron nunca. (23F&Fraga)

Son los mismos que apoyaron desde un primer momento el golpe fallido del 23F. Hay sobrados indicios de la implicación de más de uno del actual PP (chorizos por tradición) en la trama que urdió el golpe. Uno de esos indicios está impreso en las intervenciones que los parlamentarios hicieron ese mismo día. Fraga en particular ataco de manera despiadada al ex presidente Suarez que ya se había retirado literalmente aunque aun ocupara su escaño y se estaba procediendo al nombramiento de Calvo Sotelo. Fraga acuso de lo mismo que ahora Rajoy el jefe de la Gurtel acusa a Zapatero, pero en aquellos momentos de “ruido de sables” se podía ver como de una manera “canalla” se estaba proponiendo ante lo que pudiera pasar, como Presidente de un eventual gobierno instaurado por los golpistas. En la Alianza Popular de Fraga había muchos ex ministros franquistas y demasiados restos de la podredumbre de la dictadura y del Movimiento. García Carres, un ex sindicalista del Sindicato Vertical del régimen de Franco era la parte más visible de la trama civil del golpe y pruebas de ello son las llamadas telefónicas que realizo a Tejero cuando se estaba produciendo el golpe en el Congreso. Otros golpistas civiles menos audaces, o más cobardes, como os guste llamarles, se mantuvieron en segundo plano. Además en aquellos años ETA asesinaba a destajo y acababa de secuestrar a cinco cónsules extranjeros.   

La Brunete mediática, o mejor dicho para que todos sepamos de quienes hablamos, "la piara cavernaria", con Pedro Jota a la cabeza de Diario 16, se negó a salir y llevar en primera plana del diario del que era director la leyenda en la que apoyaba la democracia y se oponía al golpe. Le falto vergüenza y sobre todo cojones, algo que ahora ya sabemos con certeza. Solo tras oír y ver la intervención del Rey se dio cuenta de que se quedaba con el culo al aire y de madrugada saco en primera plana lo que El País ya hacía 10 horas que había sacado. La "Piara cavernaria" se cuido muy mucho de ofender a los que podrían haber sido los asesinos y torturadores de una generación que lucho en las calles por tener lo que hoy disfrutamos todos. No nos regalaron nada, lo que se consiguió fue el fruto de muchas manifestaciones, carreras, palos, torturas, detenciones ilegales y demasiados asesinados por la extrema derecha fascista.

Son ellos, están ahí, no se fueron nunca y ahora están medrando por devolver de nuevo a España a una dictadura promovida por el papel amarillo de los Pedro Jota, las ondas envenenadas de Losantos, o las imágenes repugnantes de las TDT de extrema derecha de los Ariza, Horcajo y cía. La multitud de adeptos al golpe se fue diluyendo conforme pasaron los días pero su actitud ante cualquier esperanza de involución nunca desapareció. Hasta que llego Aznar, el que sin "complejos" unió desde los fascistas de extrema derecha a los fascistas a secas, un ex falangista convencido de que lo mejor para España es la democracia orgánica, nombre con el que bautizo el asesino Franco a su régimen de torturas y asesinatos. La paz de los muertos, de los cementerios, es la consecuencia después de un golpe de estado. Por suerte el rey frenó el golpe, aunque las elucubraciones interesadas de gentes con diferentes intereses nos quieran hacer creer cualquier otra cosa. 

A mí me pilló yendo a buscar a mi esposa al trabajo. Llevaba la radio puesta y cuando volvíamos para casa paramos un momento en una tienda de peces tropicales para comprar peces y otras cosas para los acuarios. Un dependiente que conocía desde hacía unos meses me dijo asustado; ¿Qué piensa usted de lo que está pasando?, me voy la semana que viene a la mili y estoy "acojonado". Le conteste con estas palabras; - Ni te preocupes, el Rey no consentirá que estos fachas tomen el poder. Los hará salir con el rabo entre las piernas.-  Ahora recuerdo mis palabras y puedo aseguraros que salieron del convencimiento y la seguridad de que el Rey haría honor a su palabra. En ningún momento temí que otra dictadura volviera a torturar a España y a los españoles. No me equivoque y me alegro de ello.

Cuando oímos y leemos a los de El Mundo, La Gaceta, ABC, La Razón, Libertad digital (un sarcasmo el nombre), etc, etc, etc, estamos ante los descendientes de los asesinos y torturadores de la dictadura, y con total seguridad delante de los que de haber triunfado el golpe tendríamos como ministros, directores generales de empresas públicas y jefes de los movimientos fascistas del terror y el mangoneo. Por eso cuando ahora los veo robar el dinero de las arcas del estado, nuestro dinero, y se sienten ofendidos porque la justicia los persigue y los juzga, recuerdo aquella España de la dictadura en la que la Iglesia de Rouco bendecía al dictador asesino y lo llevaba bajo palio en las procesiones del régimen.  

Son los mismos que hubieran instaurado un gobierno del fascismo, los que ahora llenan a rebosar las filas del PP. Son los que se oponen a condenar el régimen de la dictadura de Franco, son los que se oponen a la ley de Memoria Histórica, son los que se oponen a que se investiguen las desapariciones de la dictadura, son los que se oponen a que se abran las fosas comunes donde enterraron a los republicanos asesinados, son los que se oponen a retirar los privilegios y nombramientos al asesino Franco en los ayuntamientos, son los que interponen querellas contra los jueces demócratas como Garzón, son ellos, los mismos. No votes ladrones, no votes Gurtel, nos votes fascistas, no votes Rajoy, no votes Partido Popular (chorizos por tradición).